viernes, 6 de febrero de 2009

Sobre el orígen del post anterior y las ganas de la Hiperestésia.

 Valga la aclaración del objetivo del post anterior.
En un libro de don Julio,de título "Octaedro", hay un cuento llamado: "Ahí pero dónde, cómo".
Como epígrafe de tal relato de una belleza inusual y entramado sumamente confuso a la primera leída, se encuentra una pequeña frase.
Un cuadro de René Magritte, como bien mencionó don Malvado Yin, y en dicho cuadro se representa una pipa que ocuoa el centro de la tela. Al pie de la pintura su título: Esto no es una pipa.



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Acontece pues que en vista de los últimos post de Rodrigo y Elena, he pensado sobre la posibilidades que tengo de poder saborear sus colores, saber sus nombres solo por el olor.
Y si las tuviera quisiera tenerlas al máximo.
Y...
Cuando el niño era niño,
andaba con los brazos colgando,
quería que el arroyo fuera un río,
que el río fuera un torrente,
y este charco el mar.

Cuando el niño era niño,
no sabía que era niño,
para él todo estaba animado,
y todas las almas eran una.

Cuando el niño era niño,
no tenía opinión sobre nada,
no tenía ningún hábito,
frecuentemente se sentaba en cuclillas,
y echaba a correr de pronto,
tenía un remolino en el pelo
y no ponía caras cuando lo fotografiaban.

Cuando el niño era niño
era el tiempo de preguntas como:
¿Por qué yo soy yo y no soy tú?
¿Por qué estoy aquí y por qué no allá?
¿Cuándo empezó el tiempo y dónde termina el espacio?
¿Acaso la vida bajo el sol es tan solo un sueño?
Lo que veo oigo y huelo,
¿no es sólo la apariencia de un mundo frente al mundo?
¿Existe de verdad el mal
y gente que en verdad es mala?
¿Cómo es posible que yo, el que yo soy,
no fuera antes de existir;
y que un día yo, el que yo soy,
ya no seré más éste que soy?

Cuando el niño era niño,
no podía tragar las espinacas, las judías,
el arroz con leche ni la coliflor.
Ahora lo come todo y no por obligación.

Cuando el niño era niño,
despertó una vez en una cama extraña,
y ahora lo hace una y otra vez.
Muchas personas le parecían bellas,
y ahora, con suerte, solo en ocasiones.
Imaginaba claramente un paraíso
y ahora apenas puede intuirlo.
Nada podía pensar de la nada,
y ahora se estremece ante ella.

Cuando el niño era niño,
jugaba abstraído,
y ahora se concentra en cosas como antes
sólo cuando esas cosas son su trabajo.

Cuando el niño era niño,
como alimento le bastaba una manzana y pan
y hoy sigue siendo así.

Cuando el niño era niño,
las moras le caían en la mano como sólo caen las moras
y aún sigue siendo así.
Las nueces frescas le eran ásperas en la lengua
y aún sigue siendo así.
En cada montaña ansiaba
la montaña más alta
y en cada ciudad ansiaba
una ciudad aún mayor
y aún sigue siendo así.
En la copa de un árbol cortaba las cerezas emocionado
como aún lo sigue estando.
Era tímido ante los extraños
y aún lo sigue siendo.
Esperaba la primera nieve
y aún la sigue esperando.

Cuando el niño era niño,
tiraba una vara como lanza contra un árbol,
y ésta aún sigue ahí, vibrando.



Traducción de "Lied Vom Kindsein" ("Canción de la niñez") de Peter Handke


Y también saber que nunca he visto a nadie morir, que la niña vecina mía que me gustaba cuando teníamos 11 años, y que me dió mi primer beso, murió en un taxi en un accidente el año pasado.
Y quiero verlo, quizas sentirlo extremamente.
Debería haberle dicho...
Y las cosas eran más simples de lo que pensé.
 Y recordar el sabor de la neblina en la finca de mis tíos, cuando aún solía cortar café, antes que mi tío muriera de dos balazos en la cara, justo el día que renegué para no ir con él.
Y todos los libros que recibí como única herencia de mi tío adinerado, su olor a libro viejo, roído, amontonado, valioso y amado por mi.
  Y quiero a veces poder sentir mientras muero, una voz que me diga suavemene que valió la penasentir lo que sentí, cada lágrima y cada risa.

El olor, el sabor, multiplicado por mil, de cada lugar que vi, de cada lugar al que habría ído de tener la oportunidad, de Cantabria, de Compostela, de los lugares por donde vivió mi abuelo materno, y Berlín, el que solo mi papá conoció, el que decepcionado por sus convicciones políticas vió caer el muro en el 89, 5 años antes de morir. Y luego me diría que no esperaba vivir para ver eso. Y hoy me dan ganas de llorar de recordarlo.
Y el sabor de los otros lugares a los que nunca iré, el sabor de la Plaza Garibaldi, y del Zócalo, esos lugares donde ese ser mágico decía que al ir se había acordado de mi.
El sabor de esas películas con Frank, de cada ticket que tenemos desde el 2001 y que tontamente guardo como los recuerdos de mis mejores amigos, como los conos de papel higiénico sueltos que me forraron de morado y les pusieron cola de Barney porque nos burlabamos de ello, cuando cumplí 18. Y recuerdo el olor del cabello de Karla, mi  mejor amiga, en ese mechón. Y aún los conservo.
Las viejas casas de cabañas, de Ilobásco donde mi abuela creció.
El sabor, inconmensurable y agreste de los libros de Camus y Sartre, las primeras veces que los leí.
La luz d ela mañana, los ojos de los niños, nadar en las cascadas, los reflejos de luz en las gotas de lluvia, el sol, el pan, el vino, la esperanza, la pascua, las hojas que caen de los arboles, el viento soplando el cesped fino de dónde está enterrado mi padre, ese al que no he ído a ver en años. Aunque lo amo.
El color de las piedras, que sabía que eran celestes, que eran moradas, y por eso le regalé a mi ser mágico.
Solo quería saber el sabor, al igual que los caracolitos de color blanco con solo dos puntos negros, esos que sol encontre dos, en una salida a una laguna, donde una niña de 5 años aprendió a decirme tío, antes q a su tío, y me hizo querer ser padre.Esos caracolitos solo eran dos, vos dejame creér que eran dos, no me saqués de mi sueño. Y el mío se perdío en una mudanza; no sé a que sabe el tuyo, pero espero que lo conserves.
La arena del mar el día que casi muere un amigo, debe saber más a impotencia que a cualquier otra cosa.
El sueño de la casa, la csa, el sueño de la gente querida en la otra habitación, junto a la mía. Aqué debe saber?
Los domingos pacificos para la gente que descansa, el horizonte, la luz desde el jardín, los vuelos nocturnos d elas aves, andar en bicicleta sin usar las manos,todos esos hermosos extraños, mi padre, mi madre, mi hijo sin nacer, mi vida, mi futuro. Todo lo que es importante saborear. Mientras hay tiempo.

9 Manchas en la pared:

Clau dijo...

Me gustó la canción de la niñez, especialmente esa parte de que antes le hacía el feo a la comida y ahora come de todo.

No he ido al post de Rodrigo, pero ya había leído el de Elena. Interesante eso de los colores y sabores. Yo de chiquita decía que algo olía a verde, que tenía un dolor amarillo y cosas por el estilo.

Actualmente los olores influyen mucho en mi vida, hasta hice un post que se llamaba "El olor del recuerdo"...pero me funciona también con la música, canciones que a saber por qué me evocan lugares, aunque nunca las haya escuchado ahí...también me imagino los rostros de los personajes de los libros que leo...o de los bloggers que no ponen foto =)

A mí también se me hacía que vos eras café...pero más bien sepia.

Leyendo lo que relatas de vos, entiendo mejor de dónde viene tanta melancolía y tristeza a veces.

Y bien, a seguir sintiendo, estamos vivos!!!

HuelveElena dijo...

Mirá, y no olvidés las visitas que haremos el martes!

Nadie dijo...

La diferencia entre tu post anterior y la pintura de Magritte es que, efectivamente, la pintura esa no es una pipa, pero tu post sí es un post.

Rodrigo Ramos dijo...

no sé qué decirte sobre esta entrada...

si tuviera un premio para una entrada, te lo diera.

del 503 al sv dijo...

Leí con las pupilas dilatadas solo segundos después que posteaste, al final quería comentar y me frizié, no se, no me sentía con derecho quizá. Ahora te digo que desnudarte así es de alguien grande, jamás dejés de escribir brother.

Rodrigo Ramos dijo...

me suscribo al comentario del 503 al sv.

Chichimeca dijo...

Todo lo que es importante saborear. Mientras hay tiempo.

sí, porque la lengua va perdiendo su gracia y sus papilas, como acercándose a ese sabor nulo de la muerte. y uno, apenas.

Dulce Limón dijo...

Me alegro que esto no esté en el plan, no cabe, no cabe... es inmensa sinceridad.

Raúl Marín dijo...

@Clau: Me encanta que te haya gustado, pero sobre todo, me encanta que lo hayaz entendido.

@Ele: Y las visitas para cuando?

@Nadie: Pero intentaba no ser un post
Cucaverga!!!

@Rodrigo: Faltaba más, que lo leas y no le hagás el fello es sufieicnte premio Doppleganger.

@503 al sv: Gracias. Me alegra q le haya gustado el post. Pase más seguido.

@Chichimeca: Con la edad perdemos el gusto. Ojala y no se diera eso.

@Alecita: Si, está y estará fuera del plan.