domingo, 25 de julio de 2010

La verdad, todo es mentira.

Todo.
Las ganas de intentar que todo salga bien.
La intención de ser mejor.
La sonrisa que ando colgada todo el tiempo.
La felicidad consumida en madrugadas escribiendo mentiras.
Todo es mentira.
Hasta los años que pasé esperando que la vida fuera más vida.
Incluso las gotas de tinta que se esparcen y manchan la hoja donde comenzaba a escribir.
Todo era mentira.
Mi gana de salir a medianoche a caminar al parque de la colonia, para recordar que alguna vez me sentí bien.
Y uno trata de escribir y se da cuenta que dice pura pendejada.
Mentira.
Todo es mentira. Yo sé que sigo teniendo 10 años, llego corriendo a la casa para no perderme Heathcliff, sigo oyendo como mi hermana llora la muerte de Selena, y escuchando música en ese radio que NO me robaron en el parqueo de la Escuela de San Francisco en la Juan Pablo II, mientras usaba la mochila café de poste para jugar futbol.
Mentira que tenga 27 años. No se puede tener 27 años así.
Yo sé que no es cierto. Yo sé que aún sigo feliz porque mi papá me explica todo con ejemplos de ferrocarriles, y cada vez que me quiere contar algo saca una de esas revistas alemanas o japonesas que no entiendo un carajo, pero me admiran con sus fotografías de los trenes más modernos.
Yo sé que aún me gusta la niña rubia de trenzas del 4to grado, no puede ser que no sea cierto...
No puede ser.

5 Manchas en la pared:

Sofi dijo...

si ves las cosas desde el punto de vista que nada mas somos un grano de arena (o menos) en el universo, todo es mentira. Nada existe, nada existió ni existirá.

Sad but true ;)
así que es mejor vivir nuestra "mentira" de la mejor manera posible.

Ester dijo...

Es mentira que todo sea mentira, algo tiene que ser verdad aunque ese algo sea inventando =o

Anónimo dijo...

¿quiere mi consejo? Regrese a Bulgaria.

Anónimo dijo...

Véase "Big fish" :D

Clau dijo...

Me dio nostalgia lo de tu papá :(